ICA
La congresista Norma Yarrow vuelve a generar
polémica tras aparecer en actividades proselitistas junto al ex alcalde de Lima,
Rafael López Aliaga, mientras continúa ostentando su cargo parlamentario.
En redes sociales, los usuarios cuestionaron
duramente que abandone sus funciones en el Congreso para involucrarse en
campaña política, acusándola de anteponer los intereses partidarios a su labor
legislativa.
Ante las críticas, Yarrow intentó justificar su
accionar afirmando que “estoy con licencia sin goce de haber. La licencia por
un tema de salud no sería sin goce de haber, sería una licencia médica. En este
caso no solo tengo la responsabilidad de ser congresista, también soy
secretaria general del partido. Es por eso que cumplo con ambas
responsabilidades, sin costarle al Estado”, expresó a través de la red social X.
A pesar de su defensa, sus declaraciones no
calmaron la controversia. Muchos usuarios consideran que su accionar demuestra
una clara confusión entre su rol de congresista y sus funciones partidarias, lo
que podría constituir un uso político de su investidura.
De esta manera, el caso de Norma Yarrow reabre el
debate sobre los límites éticos y legales que deben respetar los parlamentarios
cuando participan activamente en campañas políticas mientras aún forman parte
del Congreso